La misericordia de Dios es un atributo divino que se manifiesta en su compasión y amor hacia la humanidad, especialmente en el perdón y la ayuda que ofrece a pesar de nuestros errores y pecados. Es un aspecto central del cristianismo y se refleja en la disposición de Dios para perdonar, sanar y restaurar a quienes se acercan a Él con arrepentimiento